jueves, 5 de junio de 2008

DESTINO FINAL.. . . MAZCUERRAS

Sabéis...

El otro día, intentando ver “algo” en la “tele”, llegué hasta un programa que ponen en la 2, sobre las 121/2 o la 1 de la mañana, que se llama “Página 2”.
Cual no sería mi asombro al ver y oír hablar de “Los clubes de lectura”.
Me quedé tan sorprendido que no me lo podía creer.
De pronto me sentí protagonista. Yo, como componente del club de Reinosa, ahora somos dos pero no importa, me veía reflejado en “mis” compañeros de Leganés y Hospitalet. Yo era famoso. Aparecía en la “tele”. Compartía con ellos mis ilusiones, mis desacuerdos, mis críticas y mis intimidades, por que yo creo que todos aportamos algo de nuestra forma de ser o estar al grupo que formamos. Es el gran poder que tenemos, el de comunicarnos. Y después el escucharnos y hablarnos como consecuencia del ambiente que hemos creado
Mi imaginación se pone en marcha, desbordada por lo visto y oído, y emprende un “viaje”. Un viaje largo, cansado a veces, reparador otras muchas, que empieza en Octubre y acaba en Junio. ¡JUSTO CUANDO COMIENZA EL “CLUB” A TRABAJAR!
Este viaje cada uno lo empezará como pueda. Por ejemplo, nosotros, lo empezaremos en Cantabria y nos volveremos protagonistas, como detectives o jueces, depende de cada uno, a través del libro “No acosen al asesino”, y nos preguntaremos por qué podemos llegar a ser así. Luego continuaremos camino, descansando y alimentándonos bien, en el balneario donde el protagonista principal de “La montaña mágica”, Hans, comparte con nosotros los debates inteligentes sobre lo divino y lo humano; y yo podría ser Settembrini y tú, quizás Naphta , o tal vez, madame Chauchat, el amor imposible de Hans.
Repuestos y en forma seguimos la ruta prevista y nos trasladamos al corazón de la India, para sentir, ¿lástima?, ¿dolor?, ¿incomprensión?; dependerá de cómo nos veamos y nos identifiquemos cada uno de nosotros con el personaje de “El transformista”. Porque hemos cambiado. Nos ha hecho cambiar la vida. Nos hemos ido “transformando”. ¿Y, por qué no?, hemos cambiado leyendo el libro
Decidimos dar un golpe de timón, y nos embarcamos tomando rumbo hasta llegar a Brooklyn. Allí nos alojaremos, durante unos días, en el Hotel Existencia compartiendo historias con Natt, protagonista principal de “Brooklyn Follies”; a veces me hubiera gustado ser como Harry, otras Tom y otras como el niño que vemos en Lucy, con esa decisión y personalidad, o quizás Honey, porque puedo sentirme identificada con lo que hace y yo hubiera querido hacer y no hice, porque me puedo permitir “eso”, ser protagonista de la historia, mi historia.
Pero el hotel cierra. Nos tenemos que poner de nuevamente en ruta.
Destino Europa.
Sin embargo no podíamos llegar a Europa sin detenernos antes en Argelia, el país donde se desarrolla “El extranjero”. Nos es difícil situarnos en el contexto en que se desarrolla la novela. Recuerdo en las reuniones del club las diversas opiniones sobre la forma de ser y el comportamiento de Meursault, protagonista principal de la novela. Ni sentía, ni padecía, decían algunos ¿De verdad?. ¿No disfrutaba del sol, de la playa?. Le daba todo igual, decían otros. ¿Seguro...? ¿Qué pasó con el cura? Yo creo que tenía muy claro lo que para él representaba. Alguno llegó a decir: ¿Pueden existir, realmente, personas como él?
Por fin hemos llegado a Europa. La teníamos cerquita.
Un mal recibimiento a la llegada. Nos encontramos con la lacra de la guerra. Una contienda de buenos y malos; o ¿malos y malos?. Depende quien lo mire. Nos pondremos a su nivel, perderemos parte de nuestra vida en situaciones límite, y robaremos y nos pelearemos por poder vivir, podríamos decir sobrevivir, como hacen algunos de los protagonistas de “Suite Francesa”, y sentiremos piedad, dolor, pena y alegría, porque cada uno de nosotros podría formar parte, principal, de esa historia. Seguro que alguno de nosotros, tiempo atrás felizmente, aún sin quererlo, ha sido protagonista en primera línea. ¡Pero no nos pongamos tristes y disfrutemos y sintamos envidia del goce y las emociones que nos transmite la experiencia del gato que se va por los tejados!. ¡Impresionante!
O quizás nos pongamos al lado de una de las hermanas de la obra “Gemelas”. Porque al final discutimos, cada uno sentía lo que sentía, sobre la aceptación de la hermana “mala” a su otra hermana, la “buena”. ¿O era al revés? ¿Podría liberarse algún día de su pesar? Disfrutamos de la lucha por la supervivencia y nos dolía el corazón, a veces, ante la tozudez y el odio.
Estamos cansados. Se acerca el final del viaje y lo que hemos conseguido y la satisfacción que sentimos nos impide reconocer, con claridad, nuestro agotamiento. Pero aún no hemos llegado a nuestro destino.
La sorpresa viene de la mano de nuestro “Capitán Trueno” particular, Corocota, que nos cuenta sus aventuras en “El Último Soldurio”. He tenido que retroceder hasta mi infancia para ponerme al lado de los héroes. Lo he conseguido dejando de pensar en lo mayor que soy. La imaginación nos permite eso. ¡Bendita sea!
Hemos de llegar a Mazcuerras. Es el fin del viaje que programamos en Octubre.
Allí nos encontraremos con otras clases de historias, historias diferentes, con protagonistas diferentes, lugares distintos y situaciones y hechos fáciles o complicados, depende de cómo los hayan vivido cada uno. Pero... nuestras historias siempre tendrán un final feliz: hemos vivido algo diferente, nos lo hemos contado, las hemos discutido, a veces con demasiado énfasis (como la vida misma) y a pesar, o gracias, a todo eso volveremos a ponernos en camino después de pasado el estío y disfrutar de unas vacaciones que podemos aprovechar, por ejemplo, para leer un libro.
Facundo Cabral dice en una canción “... cómo no amarte si por ti soy lo que soy”
Sin ponernos tan trascendentales, podríamos decir: “...cómo no amaros si con vosotros puedo llegar a ser lo que quiera ser”
A quizás, con permiso de Joaquín Sabina, me pueda convertir en “taxista en NY”o “tabernero en Dublín”. Pero” ...si me dan a elegir prefiero ser un pirata con pata de palo y cara de malo”.

José Francisco Pérez - Reinosa

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